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5/18/2006

ANSE REITERA EL PELIGRO QUE SUPONEN LAS IMPORTACIONES DE PALMERAS PROCEDENTES DE EGIPTO, CON LA LLEGADA DE UN NUEVO BARCO AL PUERTO DE CARTAGENA

ANSE REITERA EL PELIGRO QUE SUPONEN LAS IMPORTACIONES DE PALMERAS PROCEDENTES DE EGIPTO, CON LA LLEGADA DE UN NUEVO BARCO AL PUERTO DE CARTAGENA

La llegada el día de ayer del barco Hado, con bandera de Líbano, procedente de Alexandria (Egipto) con una carga de 695 Tn de palmeras ha decepcionado nuevamente a la Asociación de Naturalistas del Sureste por cuanto supone acrecentar el riego de expansión de la plaga conocida como Picudo Rojo. Esta nueva importación demuestra la imprudencia tanto de la Administración Regional (Consejería de Agricultura) como de la Administración Central (Ministerio de Agricultura), que no están adoptando las medidas recomendadas por la comunidad científica y que están poniendo en riesgo, debido a la ausencia de Aduanas, a todas las palmeras de la Unión Europea. De hecho, el Reino de España podría estar vulnerando el derecho comunitario, concretamente el articulo 16 de la Directiva 2000/29/CE.

Según los informes científicos disponibles (Véase por ejemplo The Red Palm Weevil in the Mediterranea Area, PALM 46(4), 2002), no hay duda alguna entre la relación directa existente entre las importaciones de palmeras procedentes de Egipto y la aparición del picudo rojo en la Península Ibérica. Sin embargo, desde la Administración Regional aún no se ha explicado el origen de los focos y su ?casual? coincidencia geográfica con importaciones masivas de palmeras destinadas a diferentes desarrollos urbanísticos (por ejemplo, Balsicas/Polaris World y El Algar /Hansa Urbana, San Javier/diversos). (Resolución3 de febrero de 2006, BORM nº 43 de 21 de febrero de 2006).

Además, los dictámenes científicos (Declaration about Red Palm Weevil Management, Valencia, Nov 2005) exponen que resulta materialmente imposible garantizar la ausencia de la plaga en una palmera, anulando técnicamente la supuesta validez de los pasaportes sanitarios. Para la Asociación, siguiendo la información científica disponible, no existe otra solución que no sea suspender de forma inmediata la importación de palmeras procedentes de países afectados por el Picudo, tal y como se hizo en 1996, aunque posteriormente se levantó la prohibición por la presión de los importadores. En la actualidad, sólo se ha prohibido la importación en las islas Canarias (Orden APA/94/2006, BORM 28 enero de 2006) gracias en buena medida a la presión de los grupos ecologistas locales.

Para ANSE, la paralización de las importaciones, además de evitar la introducción de nuevos focos de picudo, podría aumentar la demanda de palmeras cultivadas y constituir una interesante alternativa agrícola, incluso en áreas marginales, frente al lucrativo negocio de las importaciones de terceros pases. Por tanto, la paralización de las importaciones debe considerarse como una oportunidad y no como una limitación, y queda justificada por los riesgos sanitarios y las recomendaciones de los expertos en la materia.