El Naturalista Digital

noticias . sostenibilidad . medio ambiente . Región de Murcia . fauna . naturaleza . vegetación . flora

4/07/2005

Carta de ANSE al Presidente Valcárcel

Sr. D. Ramón Luís Valcárcel.
Presidente de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.


Cartagena, 06 de abril de 2005


Estimado Sr.:


Una vez más me dirijo a usted en relación con la preocupante situación de degradación en la que se encuentra el Mar Menor y su entorno, y la falta de medidas de protección concretas y eficaces que garantizan la conservación a largo plazo de tan singular enclave natural que, paradójicamente, cuenta con 5 figuras de protección, cuatro de ellas internacionales, y aún no se ha aprobado el Plan de Ordenación de Recursos Naturales.

Aunque no hemos recibido respuesta a los últimos escritos que le hemos enviado sobre este asunto, confio al menos que los haya leído, y dado las instrucciones necesarias para contribuir a solucionar los problemas que en ellos le exponíamos, entre los que se encontraba la propuesta para desproteger una parte del Parque Regional de Calblanque para permitir su urbanización.

En este caso, quiero hacerle hincapié en la situación del tramo norte de La Manga, y la agresión que está sufriendo en estos últimos años en forma de una urbanización brutal y absolutamente incontrolada, que goza del apoyo y connivencia del Ayuntamiento de San Javier.

Permítame calificar como especialmente lamentable la falta de actuación de su Gobierno para impedir que el alcalde de esta localidad costera se permita una y otra vez incumplir la legislación para facilitar desarrollos urbanísticos claramente excesivos, y en varias ocasiones ilegales. Aunque posiblemente no pueda usted estar al día de todas y cada una de las tropelías e ilegalidades cometidas por este alcalde en materia urbanística o de protección de la naturaleza, imagino que si sabrá que actualmente se encuentra imputado en una denuncia por prevaricación, cuenta con una sentencia firme que condena su abuso de poder en la paralización de una obra legal, amparando otra ilegal realizada por un familiar directo, y cuenta al menos con tres expedientes sancionadores por realizar obras ilegales en el dominio costero: construcción de playas artificiales sin autorización ni competencias en el espacio protegido del Mar Menor.

Le aseguro que estos casos, de los que podemos proporcionarle información detallada en el momento que lo considere oportuno, no van a ser los únicos por los que este alcalde deberá de dar cuentas ante la justicia y la opinión pública por sus tropelías en materia urbanística, por lo que le animo a tomar decisiones inmediatas para evitar la continuación de este disparate en el que está sumida La Manga.

Sabe que le hemos dado toda nuestra confianza en relación don diversos asuntos relacionados con la protección del Mar Menor, y le he mostrado en anteriores escritos nuestra decepción por la falta de cumplimiento de sus compromisos sobre este asunto.

Francamente, no pensamos que nadie se crea ya aquél compromiso que usted hizo público de no permitir la construcción en ningún caso del acceso norte. Y es que la situación a la que se enfrenta el tramo norte con el espectacular crecimiento actual resulta muy preocupante para los próximos años, pues indudablemente contribuirá a aumentar el caos de tráfico de cada verano y la presión ciudadana de los nuevos pobladores, a los que obras como las de Puerto Mayor, paseos marítimos y otras infraestructuras diversas, junto a la regresión natural acelerada como consecuencia del cambio climático, les van a dejar casi sin playas.

El Ayuntamiento de San Javier está dando con estas obras el golpe de gracia a La Manga, y el Mar Menor y la Región no se merece lo que está pasando.

Apelo a su responsabilidad como máximo dirigente de esta Región para pedirle que no permita la continuación de las tropelías y desmanes que el alcalde de San Javier respalda e impulsa, y le agradecería algún tipo de respuesta urgente en torno a este asunto.

Con todo el respeto, no debería usted permanecer con los brazos cruzados mientras se pone la puntilla a un enclave excepcional en nuestra geografía como es el Mar Menor, sobre todo si quienes contribuyen a ello utilizan su cargo para incumplir las leyes cada vez que les viene en gana.

Reciba un cordial saludo